Desde el 1 de julio de 2018, la autoridad fiscal ha establecido que cualquier error en la clave de unidad de medida, la clave de producto o servicio, o la unidad de medida en un Comprobante Fiscal Digital por Internet (CFDI) se considera una infracción.
Esto significa que si un contribuyente asigna incorrectamente una clave de producto o servicio, está obligado a reexpedir la factura para corregir el error. Este proceso se fundamenta en el Apéndice 3 del Anexo 20, que forma parte de la Guía de llenado de CFDI versión 3.3 publicada en el portal del SAT.
¿Qué sucede si se comete un error? En caso de que se clasifique incorrectamente un producto o servicio, la autoridad puede rechazar las solicitudes de devolución o generar complicaciones durante el ejercicio de facultades de comprobación. Por lo tanto, es esencial que los contribuyentes revisen detalladamente los comprobantes que emiten y reciben, asegurándose de que los datos sean correctos y razonables.
Dado que no existen parámetros objetivos para determinar cuándo un dato es incorrecto, la revisión y clasificación adecuada se convierten en tareas fundamentales para evitar posibles infracciones y sus consecuencias.
Recomendaciones: Para evitar errores, los contribuyentes deben consultar el Apéndice 3 del Anexo 20 y utilizar las herramientas de clasificación disponibles en el portal del SAT. Esto ayudará a asegurar que las claves utilizadas en los CFDI sean correctas y que cumplan con los requisitos establecidos por la autoridad fiscal.
Mantener una correcta emisión de los CFDI no solo evita sanciones, sino que también facilita el cumplimiento de las obligaciones fiscales de manera eficiente y sin contratiempos.